miércoles, 15 de junio de 2016

SI EL LIBRO FUERA

Si el libro fuera un color, sería el azul oscuro porque crea misterio, soledad y el libro habla un poco de esto y es paranormal.

Si el libro fuera un animal, sería el tiburón porque avanza a poco a poco y te sorprende igual que la historia.

Si el libro fuera una ciudad, sería Santander porque la historia transcurre allí y habla de sus prados y el clima.

Si el libro fuera un país, sería España porque por lo que cuenta la novela el clima y el paisaje se parece bastante.

Si el libro fuera un paisaje, sería un campo con tierra y flores y por la noche sería oscuro y tenebroso.

Si el libro fuera un árbol, sería un almendro porque hace un fruto muy bueno y las flores son preciosas.

Si el libro fuera una canción sería la de Scooby-doo porque es de misterio y habla de monstruos, fantasmas y sale un fantasma en la historia.

Si el libro fuera un objeto, sería un cojín con la forma de una Luna porque crea misterio, soledad y porque al protagonista le gusta mucho el espacio y las cosas de ciencia ficción.

Si el libro fuera una película, sería la de Frankenstein porque es de misterio y miedo como el libro.

Si el libro fuera un libro, sería el de Crepúsculo porque trata de criaturas sobrenaturales como en el libro.

YO AUTOR


Nací el 10 de junio de 1953 en Barcelona, pero un año después me trasladé a Madrid. Soy un periodista, novelista y escritor de ciencia ficción y fantasía. Gané el premio Domingo Santos, UPC, Gigamesh, el premio nacional de Literatura infantil y juvenil y el premio Pablo Rido. Hice estudios de periodismo en La Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense y desde 1970 trabajé en diversos publicaciones como en la revista La Codorniz. En 1981 cambié el periodismo por la publicidad y durante 10 años trabajé como creativo en diversas agencias. En 1991 volví a la literatura (que la había abandonado para ser publicista). Hice algunas obras literarias como El maestro oscuro, La vara de Hielo o La Fraternidad de Eihwaz. Ahora vivo en Madrid, estoy casado y tengo dos hijos.

TEATRALIZACIÓN DE UN CAPÍTULO DE LA NOVELA

(Llueve en Villa Candelaria. Javier se encuentra en su dormitorio, bastante pequeño, sentado en frente a una mesa leyendo una novela de Asimov en total silencio, cuando de repente escucha el sonido de unos pasos aproximándose por el pasillo. Un taconeo de una mujer que se detuvo al llegar en frente a la puerta de su habitación. Javier alza la cabeza del libro pensando que alguien va a entrar, pero no fué así. Sinte un escalofrío, abre la puerta pero no ve a nadie. Le pareció ver una falda. De repente se da cuenta de que Violeta le espiaba desde el otro lado del pasillo.) 
VIOLETA: La has visto.
 JAVIER: ¿A quién?
 (Violeta lo mira muy fijamente) 
VIOLETA: Es increíble. Jamás hubiera pensado que tú, precisamente tú, pudieras verla.
 JAVIER: ¿De qué hablas? No he visto nada.
 (Violeta aspira por la nariz.)
 VIOLETA: ¿A qué huele?
 JAVIER: A flores... 
VIOLETA: A nardos. Pero ahora no es época de nardos.
 JAVIER: Pues será perfume.
 (Violeta sacude la cabeza) 
VIOLETA: Ninguna de nosotras usa perfume de nardos. Entonces, ¿de dónde viene el olor?
 (Javier se encoje de hombros, esa conversación le estaba poniendo nervioso.)
 JAVIER: No tengo ni idea. ¿Qué más da a lo que huela?
 VIOLETA: Estás mintiendo. La has visto.
 (Violeta se da media vuelta y echa a andar hacia su habitación.)

domingo, 8 de mayo de 2016

DESCRIPCIÓN DE LOS CINCO SENTIDOS DEL LIBRO LAS LÁGRIMAS DE SHIVA


El libro no es muy grueso pero tampoco es muy delgado, tiene la tapa fina. La mayor parte del libro es de color rojo. En la portada hay un dibujo de la Luna con el fondo de color azul. La contraportada tiene una foto del escritor beige y hay su biografía.

La portada y la contraportada tienen un tacto un poco resbaladizo, con la imagen de la Luna me imagino que el espacio es frío, aunque en la historia parece que haya un clima mediterráneo, no hace frío pero tampoco mucha calor.

El libro huele a papel ni muy nuevo ni muy viejo y a tinta, aunque en el libro desprenden perfume de nardos, campo, a madera vieja, polvo, cera, detergente, a agua, comida...

Si moviéramos muy rápido las hojas del libro, podríamos oír el ulular del viento, pero de manera subjetiva, oiríamos la madera rechinar, los pájaros, a gente hablar, el sonido de los pies con el trapo mientras patinan para encerar la casa, los cubiertos a la hora de comer, el sonido del lápiz escribiendo sobre un papel...

El libro tiene gusto a cartón resbaladizo, a hojas y a tinta, en el libro notaríamos el gusto de la comida, a ropa, a aire, el agua, la comida, a madera, a cera...

domingo, 13 de marzo de 2016